Cuando los humanos salimos de casa, los perros entran en modo “misión secreta”. Muchos dueños han compartido las cosas más absurdas, divertidas (y a veces alarmantes) que sus peludos hacen cuando creen que nadie los observa. Pero aunque parezca pura travesura, la ciencia veterinaria tiene algo que decir sobre cada locura perruna. Aquí te presentamos los 7 traviesos más comunes y lo que podría estar detrás de sus actos clandestinos.
1. El ladrón de ropa interior y calcetines: Si tu perro tiene una colección secreta de prendas personales bajo la cama, no estás solo. Este comportamiento es común en perros que buscan objetos con tu olor como forma de consuelo. Según la etología, es una forma de lidiar con la ansiedad por separación. No es venganza, ¡es amor olfativo!
2. El jardinero destructor: Muchos perros, especialmente los cachorros o razas como los Terriers, aman excavar en las macetas o desenterrar el jardín. Esto puede deberse a instinto, aburrimiento o exceso de energía. Para ellos, cavar es como hacer arte… aunque tú no estés muy de acuerdo con el resultado.
3. El artista del papel higiénico: Dejar el baño abierto puede ser una invitación a una instalación artística en blanco y suave. Desenrollar papel higiénico es divertido y estimulante para perros jóvenes, que encuentran fascinante cómo se mueve y se deshace. Además, hay un componente de juego y caza en la acción.
4. El espía de la ventana: Algunos perros pasan horas mirando por la ventana y ladrando a todo lo que se mueve. Este comportamiento responde a su instinto territorial y necesidad de estímulo visual. También puede indicar que necesitan más paseos o actividades que les permitan quemar energía.
5. El chef gourmet clandestino: Si tu perro abre la alacena o se trepa a la mesa para probar tu cena, no es por desobediente, sino por puro instinto de supervivencia. La etología explica que los perros tienen un agudo sentido del olfato y un deseo natural de aprovechar cualquier fuente de alimento disponible. Aunque tengan su plato lleno, lo tuyo siempre sabe mejor.
6. El amante de los zapatos (y sus suelas): Muchos perros sienten una atracción especial por masticar zapatos. Además del olor familiar, morder libera endorfinas y reduce el estrés. Este comportamiento es común en cachorros en etapa de dentición, pero también en adultos con ansiedad o falta de estimulación.
7. El actor de la siesta prohibida: ¿Te ha pasado que dejas el sofá impecable y al volver hay un hoyo con forma de perro? Muchos peludos adoran dormir en lugares donde no se les permite cuando nadie los ve. ¿Por qué? Porque son cómodos, huelen a ti y, seamos honestos, saben que es una travesura.
Entender estas travesuras desde la etología veterinaria nos ayuda a ver que, en realidad, los perros no actúan por malicia, sino por instinto, emoción o falta de estímulo. Con un poco de paciencia, juego y entrenamiento, puedes canalizar esa energía traviesa… ¡y seguir riéndote de sus locuras!
